1:Myself, 2:Me, 3:I.

No. No soy de esas personas que destacan, no tengo ninguna cualidad fuera de lo normal e incluso hay veces que me planteo si tengo alguna dentro de lo habitual. No me valoro, para nada. Me cuesta horrores decir que no cuando hablo de una persona que quiero. Soy de ese tipo de personas que prefieren los refrescos de lata, por el simple hecho de que puedo jugar al abecedario con la hebilla, y luego imaginarme el nombre de cualquier chico que empiece por la letra que me tocó, aunque yo ya sé cuál es el nombre de la persona que va a pasar conmigo toda la vida. Adoro acostarme y que se me caigan las lágrimas al recordar momentos que sé que puedo repetir o incluso tener muchos mejores. Tengo el dedo que sigue al gordo del pié, más largo, por lo que sí, soy celosa, muy celosa y un poco marimandona. Tengo el don de sacar de quicio a la gente, a cualquier tipo de persona. Me agobio con facilidad, y lloro con frecuencia aunque lo hago para hacer más fuerte el momento en el que río. Me encanta meter la pata y sentirme orgullosa de mí misma cuando veo que me levanto y sigo. Le suelo buscar explicación a cualquier cosa que vea estúpida, pero rara vez lo consigo. Soy cabezota, testaruda, desquiciante, chula y un tanto antipática y rara, pero prefiero creer que soy especial.  Adoro abrazar, besar, acariciar y querer a las personas importantes para mí. Soy cómplice de mis amigas, guardo secretos a tutiplen y me suele dar bastante igual la opinión de las personas que no me conocen. No soy nadie fuera de lo común, no sé muchas veces diferenciar entre lo bueno y lo malo para mí. ODIO QUE ME PONGAN NORMAS. Adoro estar sola en casa, ponerme la música a tope y bailar como si estuviera en una fiesta. Soy de esas que cuando van por la calle con los cascos y la música puesta, siente que está en un videoclip, pero oye, que de ilusiones también se vive. Me equivoco el 99% de las veces, pero cuando hago las cosas bien, hago feliz a la gente que me quiere, así que todo compensa. Soy una revoltosa, y suelo alborotar a las personas que pasan conmigo más de un día seguido. También tengo el autoestima por los suelos. Pero qué se le va a hacer, soy así, lo he sido siempre y pienso seguir siéndolo, ¿Cambiar?, sólo si es a mejor.