Sentir que no hay nada ni nadie en el mundo que pueda romper ese momento, es algo mágico. Sentir mariposas en la barriga y un miedo increíble de perderle. Es únicamente eso, miedo. Hoy puedo decir que he sentido lo que es ser feliz de verdad. Hoy he mirado a mi derecha y le he visto cómo dormía sobre mi hombro y respiraba tranquilamente. Hubo un momento en el que sentí cómo los dos corazones latían al mismo tiempo. No había nada que pudiera hacer que dejara de mirarle. Se me aguaron los ojos. ¿Cómo podría vivir sin su amor?, me volvería loca. Es sentir que todo por lo que has luchado tanto tiempo, todo a lo que has aspirado desde que comenzaste a experimentar eso de sentir cosas por alguien, llegara. De un día para otro, llega. Y tienes miedo de mirarle, porque sabes qué es eso que te está subiendo por el estómago y hace que te erices. Sabes por qué se te pone una sonrisa en la cara cuando piensas en él y hay una parte de ti que siente dolor, dolor por el simple hecho de pensar que el día de mañana no esté.
No sé si te lo habré dicho alguna vez. Pero adoro mirarte desde la parte de abajo de tu nuca y ver lo diferente que se ve el mundo desde el calor de las sábanas de tu cama. Que no sé si tú lo habrás sentido alguna vez conmigo, pero cuando te veo sonreír y sé que tal vez es porque acabamos de terminar de discutir y nos damos cuenta de que a pesar de todo, seguimos ahí, es como si me dieran una nueva oportunidad para empezar de nuevo. Porque cada día que pasa, es una oportunidad más que tengo de poder ser feliz a tu lado y darlo todo para ver que la persona a la que AMO, sea feliz.
Joder, espero que lo entiendas. Que nunca habrá nadie en este mundo que te quiera tanto como yo.
PD; Hoy podré dormir tranquila, porque ya me he despertado y lo primero que he visto al abrir los ojos, ha sido a ti.
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